Desde la entrada en vigor el 1 de junio de las nuevas tarifas del mercado energético, los españoles hemos pasado a tener una discriminación horaria en tres periodos (punta, llano y valle) por las que pagaremos de forma diferenciada. Y junto a esta nueva tarificación de la luz, también vamos a explicarte en qué va a consistir la nueva medida del gobierno dirigida a la reducción del IVA actual.
La noticia sobre el IVA, aunque viene después de establecerse esta subida del precio de la luz, ayudará a reducir la cuantía de lo que se paga con la reducción de este impuesto del 21% al 10% para quienes tengan en sus hogares una potencia contratada de hasta 10 kilovatios. Y se mantendrá hasta final de año siempre que el precio medio mensual del mercado mayorista esté por encima de los 45€/por megavatio hora (MWh).
Junto a esta bajada del IVA, que recuerda a la bajada que se experimentó con las mascarillas, el gobierno anunció que suspenderá hasta septiembre el impuesto del 7% a la generación eléctrica.
¿Por qué estos cambios sobre la factura de la luz?
Para compararlo con otros países europeos, España es uno de los países que hasta ahora había mantenido el IVA de la electricidad más alto al 21%. Otros países como Portugal lo bajó del 23% al 6%, Francia al 5,5%, Italia al 10% e Irlanda al 13,5%. A pesar de la buena noticia, la medida es temporal hasta final de año y responde a una situación social y circunstancial por el precio de la luz actual en máximos históricos. No obstante, no deja de ser un “parche” por el alto coste que está teniendo para los hogares la subida de los precios.
Desde la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) explican que el precio de la electricidad, que ronda niveles históricos, es debido a la fuerte subida del gas y a los derechos de emisión del CO2 tras la decisión de Bruselas de adelantar el compromiso de emisiones que se acordó en el Pacto Verde Europeo. Pero este cambio de perspectiva no sólo afecta a la factura de la luz, ya que se espera que el recibo del gas también suba en un 4% a partir del 1 de julio.
Además de esta política de descarbonización para los próximos años, con ello también pretenden que el consumidor medio se conciencie, optimice su factura y cambie sus hábitos de consumo de hora punta a los otros dos tramos horarios más baratos.
Quizá una de las soluciones esté en optar por las renovables. Pero para ello todavía queda bastante recorrido hasta que mejoren sus precios en el mercado y sea una alternativa asequible para las familias.
Tramos horarios y nueva tarificación
Respecto a la nueva tarificación, las horas en las que pagaremos menos por nuestro consumo eléctrico se encontrarán en el periodo valle. El coste que tiene, desde el pasado 1 de junio, se factura a 0,11€/kWh en los tramos horarios de la madrugada, fines de semana y festivos. No obstante, aunque son de coste bajo, si lo comparamos con años anteriores, es el mismo precio que se pagaba el año pasado en el periodo caro (punta). Por lo que la subida va a ser notable en las horas de mayor consumo tal y como veremos en nuestra próxima factura.
Otra de las novedades de la nueva tarifa es que a partir de ahora se va a considerar a las horas valle como el periodo de tarificación de coste medio, 0,15 €/kWh. En las facturas anteriores no teníamos este periodo de tarificación, pero después del pasado 1 de junio vamos a pagar estos tramos horarios de forma diferenciada a los otros, es decir, en las primeras horas de la mañana, mediodías y noche.
Por tanto, tendremos que tener cuidado con las horas punta (las más caras), cuyo coste se ha fijado en 0,24 €/kWh. Esta tarifa por la hora punta es la que más ha subido desde el año pasado. Los tramos horarios más caros se producirán, como se puede observar en la imagen anterior, desde las 10:00 de la mañana a las 14:00 de la tarde y desde las 18:00 a las 22:00 de la noche.
¿Cómo nos afecta si somos de mercado regulado o libre?
La subida de la factura de la luz afectará a todos los consumidores, aunque no por igual. Para aquellos que estén en el mercado regulado de Precio Voluntario al Pequeño Consumidor les puede afectar más, ya que los cambios se aplicarán sin tener que hacer nada. Mientras que los que tengan el suministro contratado en el mercado libre, más caro, dependerá de las comercializadoras, que pagan la energía, si quieren seguir estos tres tramos horarios o eligen no repercutir el coste en los consumidores de la misma manera con sus propias tarifas planas sin franjas horarias.
Según algunos expertos, aquellos consumidores que estén dentro del mercado regulado y tengan discriminación horaria (la más rentable hasta ahora) pasarán de tener unas 10 horas valle a una combinación de hora llana y punta. Por ello, aquellas personas que estén en el mercado regulado pero no tengan el bono social, tienen que tener especial cuidado si optan por cambiar de compañía atendiendo a las ofertas, promociones y descuentos que pueden recibir de algunas comercializadoras, prometiendo tarifas más baratas. Y es que, puede que a la larga no lleguen a ver tal efecto en la factura.
Respecto a la parte de los impuestos, ahorraremos con la bajada del IVA y la suspensión del 7% que pagamos del impuesto por generación eléctrica. Además, se producirán cambios en los peajes y en los cargos. Desde ahora podremos contratar dos potencias diferenciadas (de manera gratuita hasta 2022), para las tarifas menores de 15kW, que pasarán a denominarse 2.0TD y sustituirán a las anteriores (2.0, 2.1). El nuevo sistema también establece una pequeña bajada en el peaje de potencia que pasa de los 38,04€ por kW a los 32,21€ por kW.
Qué nos interesa saber
- Con la bajada del IVA veremos una bajada de algunos céntimos por hora al usar los electrodomésticos que más consumen y solemos utilizar (lavadora, horno, lavavajillas, microondas, plancha, aire acondicionado o calefacción eléctrica). Ese ahorro está estimado entre los 5 y 4 céntimos en horas punta, de 3 y a 4 céntimos en horas llano y de 2 a 1 céntimo en horas valle.
- Debemos conocer cuál es la potencia que tenemos contratada y si esta excede a la que deberíamos tener por el tamaño de nuestro hogar, si tenemos calefacción o por el número de electrodomésticos.
- Si en nuestro hogar tenemos una tarifa de discriminación horaria sujeta a los tres períodos marcados por el gobierno, utilizar los tramos horarios de bajo coste para hacer un mayor consumo puede repercutir en que suba menos nuestra factura de la luz. Esto es: consumir más en horario de madrugada, evitar las horas puntas y, a medio coste, consumir más en horario de mañanas, tardes y fines de semana durante las horas llanas.
- Las comercializadoras suelen hacer descuentos para aquellos clientes que quieran recibir sus facturas de forma electrónica. También si se contrata online.
- Como clientes, tenemos ciertos derechos en los servicios que contratamos. Un ejemplo son los costes adicionales contratados por los usuarios para tener un servicio técnico que sirva para cubrir averías. Aunque muchos usuarios lo acaben contratando, no siempre conocen este dato sobre los servicios que cubre. Pero en líneas generales, para cualquier incidencia que tengamos con un electrodoméstico de menos de 10 años, se suele ofrecer este servicio de urgencia para que en un máximo de 24 horas un técnico vaya a revisar la avería.
- Las comercializadoras no cobran por un cambio de titular del suministro. Esto es importante si somos inquilinos y, por ejemplo, queremos reducir la potencia contratada.
- Actualmente, cambiar de comercializadora es más fácil que hace unos años. Algunas de las políticas de estas compañías han cambiado y no exigen permanencia, aunque suelen penalizar si nos cambiamos con alguna tarifa promocional ventajosa. Por lo que es importante estudiar cualquier cambio y ver si nos compensa.
Dónde dirigirnos si tenemos alguna incidencia
Muchos usuarios tienen dificultades para distinguir entre el papel que cumple la empresa distribuidora y la comercializadora. De forma que, conocer cuáles son las principales funciones de ambas nos puede ayudar a saber a quién dirigirnos si tenemos algún problema o inconveniente.
En el caso de las compañías distribuidoras se encargan de instalar y mantener las redes de media y baja tensión y los equipos de medida, como son los contadores y maxímetros. Además, son también las que realizan las lecturas de los contadores que posteriormente envían a las comercializadoras para que nos cobren por el consumo de la luz.
Las comercializadoras, sin embargo, son las que compran directamente la electricidad en el mercado mayorista, es decir, allí donde se produce y factura por el servicio al consumidor final mediante las facturas del contador que le envíe la distribuidora. También, fijan las tarifas eléctricas como comercializadoras del mercado libre, al contrario de lo que ocurre en el mercado regulado.
Para más información te recomendamos visitar la página de la CNMC y el simulador para calcular tu factura de la luz.