Los acontecimientos que se están produciendo este año, y estamos a finales de enero, hace años que no se recordaban con la intensidad con la que lo estamos viviendo. Desde hace unos días, en Granada la tierra se mueve. Los movimientos sísmicos, conocidos como enjambres, que se están produciendo en cadena, en un punto muy concreto de la Vega de Granada, han afectado a poblaciones de esta zona como Santa Fe, Atarfe, Vegas del Genil o Pinos Puente. El Instituto Geológico Nacional ha recogido 740 seísmos; cinco de ellos, superiores a 4 en la escala Richter. Por lo que hace imposible que podamos dormir sin notar uno de estos movimientos que te aceleran el corazón y te ponen en guardia toda la noche.
Cientos de personas han preferido dormir en la calle, dentro de sus coches, a permanecer en las casas. Aunque esto implique no pegar ojo al estar escuchando las sirenas de los policías, bomberos y Protección Civil, pasando de un sitio a otro y atendiendo a las llamadas de los vecinos. Según los expertos, que tenemos muchos y muy buenos en Granada, tendremos que vivir un tiempo más así, sin llegar a tener movimientos de magnitudes más fuertes, precisamente porque esa cocatenación de terremotos hacen que las réplicas pierdan fuerza. También, por suerte, las construcciones de edificios en Granada están preparadas por si se producen. Pero no todas. Las casas más antiguas y edificios emblemáticos de poblaciones como Santa Fe o la ciudad de Granada, ya se han visto afectadas. En bastantes casas de Santa Fe se han producido grietas leves y de mayor consideración, también se ha visto dañada la Iglesia de la Encarnación, etc. En Granada capital, la fachada de la catedral, e incluso en la propia Alhambra, aunque por ahora, sin daños estructurales que puedan ponerla en peligro.
A todos nos genera cierta impotencia no poder hacer nada al respecto. Sólo podemos esperar y que nos den una tregua más que merecida. En estos días, Protección Civil y el equipo de bomberos han estado dando el do de pecho. Principalmente, revisando todos los daños estructurales que se han dado en algunas viviendas para considerar el estado en el que se encuentran las propiedades. Algo que es de elogiar y que desde este medio, me gustaría agradecer.
En estos casos, prevenir es lo más importante. Sólo queda seguir las recomendaciones y las opiniones de los expertos. Esperemos que las placas tectónicas de Euroasia y África nos den un respiro, al menos por ahora.